Un préstamo con garantía hipotecaria te permite acceder a grandes cantidades de dinero usando tu propiedad como aval. Conoce sus beneficios, riesgos y cómo funciona este tipo de financiación.

Para aquellos que buscan obtener financiación sin vender su propiedad, un préstamo con garantía hipotecaria es una solución eficaz. Este tipo de préstamo permite aprovechar el valor del inmueble como aval, ofreciendo acceso a grandes cantidades de dinero en condiciones favorables. 

Por otro lado, si estás interesado en cómo los inmuebles pueden generar rentabilidad, existen fondos de inversión alternativa que actúan como la contraparte en esta dinámica. Estos vehículos generan rentabilidades para sus inversores concediendo este tipo de préstamos a empresas que los respaldan con sus propiedades, ofreciendo una combinación de seguridad y rentabilidad en el mercado inmobiliario.

Ante todo, es crucial conocer en detalle cómo funciona antes de tomar una decisión.

¿Qué es un préstamo con garantía hipotecaria?

Un préstamo con garantía hipotecaria es un tipo de financiación donde el solicitante utiliza su vivienda o cualquier propiedad inmobiliaria como garantía. Esto significa que, si no se cumplen los pagos del préstamo, el banco o la entidad financiera puede reclamar la propiedad. A cambio, se obtiene un préstamo con mejores condiciones que un crédito sin garantía, tanto en términos de tipos de interés como en los plazos de amortización.

¿Quién puede solicitar un préstamo con garantía hipotecaria?

Cualquier persona que posea una propiedad puede ser candidata para solicitar este tipo de préstamo, siempre que cumpla con ciertos requisitos básicos establecidos por la entidad financiera. Estos incluyen la capacidad de devolver el préstamo (generalmente evaluada mediante análisis de ingresos y deudas) y que la propiedad esté libre de cargas o con suficiente valor como para cubrir el importe solicitado.

Este tipo de préstamo es ideal para quienes necesitan una cantidad significativa de dinero y tienen una propiedad que pueden utilizar como aval. Es común utilizar estos préstamos para financiar grandes proyectos, como reformas, inversiones o consolidación de deudas.

Para hacernos una idea, es una opción popular para quienes buscan:

  • Financiación de reformas importantes.
  • Comprar una segunda vivienda.
  • Consolidar deudas más costosas.

¿Cómo se calcula el importe del préstamo?

El importe que se puede solicitar depende del valor de la propiedad que se ofrece como garantía. La entidad financiera realiza una tasación y, en función de ese valor, suele conceder entre el 60% y el 80% del total. Por ejemplo, si una propiedad tiene un valor de 200.000 €, es posible obtener entre 120.000 € y 160.000 €, dependiendo de las condiciones del banco.

Este enfoque permite a los particulares obtener un capital importante sin tener que recurrir a créditos más caros o a la venta de su propiedad, manteniendo la posesión de su inmueble.

Ventajas de los préstamos con garantía hipotecaria

Las principales ventajas de este tipo de préstamos incluyen:

  • Tipos de interés bajos: Al contar con una propiedad como aval, el prestamista asume menos riesgo, lo que se traduce en intereses más reducidos.
  • Plazos flexibles: Normalmente, los plazos de devolución son más largos, lo que permite planificar cómodamente.
  • Acceso a grandes cantidades: Puedes obtener una cantidad significativa, ideal para grandes proyectos o necesidades a largo plazo.
  • Conservación del activo: No necesitas vender tu propiedad para obtener el dinero, lo que te permite seguir beneficiándote de su valor.

Riesgos de un préstamo con garantía hipotecaria

A pesar de sus ventajas, hay riesgos a tener en cuenta:

  • Posible pérdida de la propiedad: Si no puedes hacer frente a los pagos, el banco puede ejecutar la hipoteca y quedarse con tu inmueble.
  • Costes adicionales: Las tasaciones, comisiones y gastos notariales pueden encarecer el proceso.
  • Compromiso a largo plazo: Al ser un préstamo de gran envergadura, el plazo de amortización puede comprometer tu liquidez a largo plazo.
  • Vulnerabilidad ante cambios económicos: Si tus ingresos disminuyen o las condiciones económicas cambian, podrías enfrentar dificultades para cumplir con los pagos.

Alternativas para quienes buscan invertir

Si bien los préstamos con garantía hipotecaria ofrecen una solución para obtener capital, también existen opciones para aquellos interesados en inversiones más seguras y rentables, como los fondos de inversión alternativa. Los fondos Beka Alpha Alternative Income son un ejemplo ideal de cómo obtener rendimiento a partir de inversiones respaldadas por activos inmobiliarios.

Están diseñados para inversores profesionales que buscan una rentabilidad atractiva con la seguridad de préstamos garantizados por bienes inmuebles. Estos fondos financian a empresas en España y Portugal a través de préstamos respaldados por sus activos inmobiliarios. Con vencimientos de entre 6 meses y 3 años, representan una alternativa ideal para quienes desean participar en el mercado inmobiliario sin gestionar directamente las propiedades, ofreciendo inversiones a corto plazo y acceso a una cartera diversificada seleccionada por un equipo de primer nivel.

Conclusión

Los préstamos con garantía hipotecaria son una herramienta financiera potente para particulares que buscan aprovechar el valor de sus propiedades sin tener que venderlas. Ofrecen acceso a una cantidad importante de capital con condiciones más favorables que otros tipos de préstamos, pero requieren una planificación cuidadosa para evitar riesgos innecesarios. Además, para aquellos interesados en explorar oportunidades de inversión, proporcionan una opción de bajo riesgo respaldada por activos inmobiliarios, que permite a los inversores obtener rentabilidad de forma segura y eficiente.